En algunos títulos cinematográficos, especialmente cuando son proyectados en fílmico, se pueden distinguir los micrófonos, en ciertas tomas aquí y allá. ¿Por qué ocurre esto?
Cuando son rodadas con película de cine, muchas producciones no anamórficas, pese a que van a ser distribuidas en "panorámico" (1:1,85), se ruedan en académico (1:1,37) para que, en postproducción, se seleccione el cuadro exacto que va a quedar en el negativo final. Antes de proceder el copiado fílmico, en el laboratorio enmascaran la parte superior e inferior del fotograma pero, ¡ojo!, esto no ocurre siempre, pues en la cadena de distribución es fácil encontrarse con el mercachifle de turno que decide ahorrar ahí el último duro.
En cualquier caso, aun siendo copiadas a plano completo, no se deberían observar los micrófonos (ni los bordes de los parasoles), si los operadores de las salas, o proyeccionistas, fuesen titulados, algo que no ocurría en los últimos años. Un proyeccionista titulado, aun viendo el positivo de 35 mm en académico, se fijaría en la relación de aspecto indicada en las cajas, y colocaría la ventanilla adecuada, en este caso, 1.85 o 1.66.
El problema es mas grave en 16 mm pues, salvo Fumeo y otra marca mas, ningún proyector trae ventanilla de relación de aspecto variable. En los dos vídeos, puede verse el micrófono en dos secuencias de la versión en Súper-8 de "El silencio de los corderos" (ojo, proyectada con luz ambiente).
Mi amiga Juliana Kelly, una de las escasas archivistas femeninas (sino la única) de positivos fílmicos en España, es la feliz poseedora en 35 mm de "Re-Animator" (1985): en la escena en que traspasan el cuerpo, cuando la proyecta con ventanilla de 1.37, se ve ¡¡¡medio cuerpo del muñeco!!!, algo que obviamente Stuart Gordon nunca pensó que nadie viese.
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