domingo, 1 de junio de 2025

SECRETS REVEALED BY A KODAK RETIREE: EKTACHROME 64T, GRAINLESS!

How can you develop the old Ektachrome 64T with virtually no grain? That was the question—and the unexpected discovery— that Álex brought back after a brief May 1st trip to London.

The original purpose of his trip wasn’t tourism. It was, in true Super-8 spirit, a logistical maneuver: picking up a Fujicascope SH30 projector he’d bought in the UK. Believe it or not, the cost of the trip was actually lower than having the unit shipped to Spain, thanks to a last-minute travel deal.

But the real surprise came at the pickup address.

It turned out to be an apartment in Hemel Hempstead, inside a residential building constructed on what was once Kodak’s massive administrative and industrial complex, known as the Kodak Tower.

The seller, a dignified nonagenarian named Mr. Brocklehurst, turned out to be a retired technician from Kodak’s lab that used to operate right there. He told Álex that Kodak had shown great gratitude to its employees: when the site was repurposed about fifteen years ago, many were offered the chance to buy apartments in the area at very affordable prices.

The projector Álex was collecting —a pristine Fujicascope SH30 with an f/1.0 lens— wasn’t just any unit. It had been one of two used in the lab to occasionally review short film segments, chosen for its robust, industrial reliability and ease of manual threading. In 1979, these SH30s were replaced by Fumeo 9119 units, and this one was given to Mr. Brocklehurst, who kept it in mint condition ever since.

But the real treasure of the trip came when Mr. Brocklehurst, noticing that Álex was filming his visit with a tiny Fuji PX300 loaded with hand-reloaded Single-8 cartridges of Kodak Ektachrome 64T, handed him a handwritten notebook.

Not just any notebook. This was a personal compilation of private lab notes —never published anywhere— including exclusive tweaks and chemical adjustments to improve development results for various emulsions… including the notoriously tricky Ektachrome 64T.


A LITTLE CONTEXT: THE TROUBLED LIFE OF 64T

When Kodak released Ektachrome 64T (7280) in 2005, the reaction among Super-8 filmmakers was lukewarm at best.

First, it was replacing the legendary Kodachrome —an unforgivable heresy in many eyes. Then came the fact that its sensitivity (64 ASA) couldn’t be correctly read by many camera meters. And finally, once it came back from the labs, the grain…

Sure, it was a sharp emulsion and capable of vivid colors when fresh, but that grain made it far from ideal for certain projects.

Kodak distributed this stock until 2010, when it was replaced by the more vibrant and widely beloved Ektachrome 100D (7285)—a film some even prefer (not me!) over the newer 7294, which I had the privilege of testing in a world-exclusive for Silvergrain Classics, thanks to my friendship with Kodak’s then-VP.

BACK TO THE LAB… AND THE MIRACLE

About a year ago, I managed to get my hands on 20 cartridges of Ektachrome 64T. My plan was to shoot a personal film diary during my 64th year of life. Time got the better of me, and I only managed to shoot a few rolls.

The first ones, processed by Frank Bruisma in his Dutch lab, came out fine… but with noticeable grain. Same with the ones I developed myself, using a vintage Soviet spiral tank.

Nowadays, thanks to a collaboration between JoBo and the SELLIER FILM FESTIVAL, I have the exceptional JoBo CPP Classic processor in my lab. Its results are on par with continuous-run commercial labs. Still, even with this beautiful machine, the grain was always there.

Until now.

Yesterday morning, we processed the footage Álex shot in London, following Mr. Brocklehurst’s handwritten notes—a kind of arcane lab grimoire from his decades of experimentation.

We used standard JoBo E6 chemistry, but adjusted the development time and lowered the temperature according to the retired technician’s suggestions.

The result?
Absolutely stunning. Practically no grain. A level of clarity and smoothness I had never thought possible with this emulsion. I was in awe before the drying drum even stopped spinning.

Sadly, I only have a few cartridges of 64T left…

As a final surprise, Mr. Brocklehurst gave Álex a copy of What Shall I Film? by Ivan Watson—known fondly as “Uncle Ivan”—and Álex, knowing that I had once met the author, generously passed it on to me.

And to top it all off? Álex brought the Fujicascope SH30 onto the plane as carry-on. Not even Brexit nor customs officials got in the way.

No tariffs. No VAT.
Film: 1
Bureaucracy: 0

A lightning trip to London —full of S8 films, secrets… and small miracles.



sábado, 31 de mayo de 2025

SECRETOS REVELADOS POR UN JUBILADO DE KODAK: EKTACHROME 64T SIN GRANO

¿Cómo revelar la antigua Ektachrome 64T sin apenas grano? Esa fue la pregunta, y el hallazgo inesperado, que trajo consigo Álex, tras una breve escapada a Londres el 1 de mayo.

El fin primordial de su viaje no fue turístico, sino, más bien, una estrategia logística con espíritu superochista: recoger en mano un proyector Fujicascope SH30 que había comprado en el Reino Unido pues, por increíble que parezca, el coste de su viaje fue inferior al de enviar esta pesada máquina por mensajería a España, gracias a una oferta de última hora con una agencia de viajes de El Ferrol.  Pero lo mejor del asunto no fue el ahorro, sino la sorpresa en el punto de recogida.

La dirección correspondía a un apartamento en Hemel Hempstead, en un edificio residencial construido sobre el antiguo complejo de oficinas e instalaciones industriales de Kodak, conocido como la Torre Kodak

Asombroso verificar la ausencia de grano de la 64T en el tambor de secado

El vendedor, un caballero nonagenario llamado Mr. Brocklehurst, resultó ser un jubilado del recordado laboratorio Kodak que operaba en esa misma dirección. La empresa, según le contó a Álex, tuvo un gesto de gratitud con sus trabajadores, permitiéndoles adquirir apartamentos en la zona a precios muy accesibles cuando el complejo fue reconvertido de industrial a residencial hace unos quince años.

El proyector Fujicascope SH30 con objetivo 1.0 que Álex recogía no era uno cualquiera: era uno de los dos que se usó en el laboratorio para revisar ocasionalmente fragmentos de película, en un modelo que fue elegido por su robustez industrial y la facilidad de desenhebrado. Posteriormente, en 1979, sustituirían estos SH30 por un par de proyectores Fumeo 9119 y esta unidad le fue regalada al vendedor, que la mantuvo inmaculada durante todas estas décadas. 

La gran sorpresa llegó cuando Mr. Brocklehurst, intrigado al ver que Álex filmaba su estancia con una diminuta Fuji PX300 con cartuchos Single-8 recargados artesanalmente con Kodak Ektachrome 64T, decidió entregarle un cuaderno manuscrito.

No era cualquier librito. Se trataba de un compendio de notas personales, nunca publicadas, en las que este veterano de los laboratorios Kodak volcó sus observaciones y fórmulas exclusivas para optimizar procesos de revelado, incluidas instrucciones específicas para la problemática Ektachrome 64T.

El SH30 de Kodak proyectando la película 64T recién revelada

UN POCO DE CONTEXTO: LA 64T Y SU MALA FAMA. 

Cuando en 2005 Kodak lanzó la Ektachrome 64T, conocida profesionalomente como 7280,  el recibimiento fue frío entre los superochistas. Y no sin razón: venía a sustituir a la mítica Kodachrome, en un acto de herejía difícil de perdonar. Además, su sensibilidad (64 ASA) no se podía ajustar con precisión en muchas cámaras, y su grano era, para ciertos usos, demasiado ostensible.

Kodak mantuvo esta emulsión hasta 2010, cuando la sustituyó por la más vibrante y apreciada Ektachrome 100D (7285), a la que algunos —aunque no es mi caso—, prefieren incluso sobre la actual 7294, que tuve el privilegio de probar en primicia mundial para Silvergrain Classics, gracias a mi amistad con el entonces vicepresidente de Kodak.

Álex me obsequió este libro hace unos días

DE VUELTA AL LABORATORIO... Y AL MILAGRO.

Hace algo más de un año, conseguí un paquete de 20 cartuchos de Ektachrome 64T, con la idea de documentar, en película, mi año número 64 de vida. El tiempo me ganó la batalla, y solo rodé unos pocos.
Los primeros, revelados por Frank Bruisma en su laboratorio de Holanda, vinieron perfectos… pero con grano. Lo mismo ocurrió con otros que procesé personalmente en una vieja espiral soviética.

Como ahora, gracias a la colaboración entre JoBo y el Sellier Film Festival, dispongo de una fabulosa procesadora JoBo CPP Classic en mis instalaciones, y que, con ella, la calidad del revelado alcanza niveles comparables a los de los grandes laboratorios en continuo, también revelé 64T en la JoBo. Pero el grano ahí seguía. Hasta hoy.

Hoy sábado, al alba, revelamos el metraje que Álex filmó en Londres, siguiendo los apuntes de Mr. Brocklehurst en esa especie de códice con secretos arcanos fruto de décadas de experimentaciones

Empleamos los químicos estándar del proceso E6 de JoBo, pero ajustamos el tiempo de revelado y la temperatura según las notas del inglés.
El resultado fue sencillamente asombroso: ¡prácticamente sin grano! Un rendimiento jamás visto por mí en esta emulsión que ya me dejó anonadado en el tambor de secado.
La pena es que apenas me queda metraje de esta emulsión.

Como broche final del viaje, Mr. Brocklehurst le regaló a Álex un ejemplar de "What Shall I Film?", de Ivan Watson —el inolvidable "tío Iván"—, que Álex, sabiendo que yo llegué a conocer al autor, tuvo el gesto de donar a la biblioteca del Sellier, Cinemateca de Galicia.

Y por si fuera poco, el proyector Fujicascope SH30 lo trajo Álex en la cabina del avión, como equipaje de mano. Ni el Brexit ni la Aduana lograron interceptarlo.
Ni arancel, ni IVA. Cine 1 - Burocracia 0.

Un viaje relámpago, pero lleno de cine en fílmico.
Y de secretos revelados.

jueves, 29 de mayo de 2025

CINEMAGIC: COMPLETED COLLECTION... AFTER 25 YEARS!!!

Some quests we choose. Others seem to choose us. Like the one I began twenty-five years ago — almost without noticing — and that, yesterday, finally came to an end.

Since childhood, when shooting imaginary Super-8 films often took priority over my school homework, I was a loyal reader of Movie Maker (UK) and Super 8 Filmmaker (USA), both sold at a newsstand in my city (which, sadly, closed its shutters in 2024). I still keep complete collections of both magazines — in the case of Movie Maker, even bound by year, lined up proudly in my archive.

But it wasn’t until well into this century that I discovered, through whispers from fellow American cinephiles, a publication that seemed tailor-made for me: Cinemagic.

This was no ordinary magazine. It began as a humble fanzine in the late '70s in the United States and gradually evolved into a full-fledged professional publication throughout the 1980s — dedicated entirely to the kind of cinema I love most: Super 8, practical special effects crafted with ingenuity and patience (not mouse clicks), and glorious stop motion on real film. A magazine that breathed the same creative spirit I’ve always aspired to capture in my own work. Oh, if only I’d found it as a teenager — my life might have taken a very different turn.

Once I knew Cinemagic existed, a new mission took shape — or rather, it chose me: to assemble the complete collection.

It’s been a search worthy of a monastic librarian — slow, quiet, and full of hope. Some issues came as unexpected gifts from generous fellow filmmakers. Others were hunted down at collectors’ fairs or through the darker corners of eBay, sometimes for a song… and sometimes at prices fit for medieval manuscripts.

About a year ago, I thought the mission was complete. I had all the issues — except one. Issue No. 32. That elusive, cursed issue slipped through my fingers twice: always scooped up at the last moment by an American who clicked faster — or stayed up later — than I did.

Until a few days ago.

An alert arrived. The price was fair. And this time… I won.

I feared it might vanish somewhere between the U.S. and Galicia, Spain — lost in the bureaucratic abyss of customs and tariffs. But no: yesterday it arrived, beautifully packaged, still smelling of old American shelves and waiting to be devoured.

I began reading it last night, during dinner, with the same giddy anticipation I felt as a boy opening my first packets of freshly developed Kodachrome reels.

This issue brought an extra surprise — a real gem: a letter to the editor signed by none other than Ray Harryhausen himself. Yes, the master of stop motion. He was a Cinemagic subscriber. That alone is worth the hunt.

And so, with this issue, the collection is now truly complete. And, if I may be so bold, it might just be the only complete Cinemagic collection in all of Europe.

Last night, I slept like a baby. Or better yet: I slept with a letter from Ray waiting for me on the nightstand.



miércoles, 28 de mayo de 2025

CINEMAGIC: COLECCIÓN COMPLETADA… ¡¡¡TRAS UN CUARTO DE SIGLO!!!

Hay misiones que uno elige. Otras, pareciese que lo eligiesen a uno, como una que comencé hace veinticinco años, casi sin darme cuenta, y que, ayer, al fin, terminó. Desde niño, cuando la imaginación de mis rodajes en Súper-8 eran más frecuentes que mis deberes escolares, fui lector fiel de la británica "Movie Maker", y de la norteamericana "Super 8 Filmmaker", que se vendían en un kiosko de mi ciudad (cerrado el año pasado, 2024).  Las colecciones de ambas revistas ocupan con orgullo varias baldas de mi archivo, en el caso de "Movie Maker" incluso con los tomos encuadernados por años.

Extrayendo el preciado ejemplar de su caja: ¡como nuevo tras casi medio siglo!

Pero no fue hasta bien entrado este siglo que, por soplos de otros cineístas americanos, descubrí una revista que parecía publicada para mí: "Cinemagic".

Es una revista atípica,  nacida como humilde fanzine en Estados Unidos en la segunda mitad de los setenta, y que fue creciendo hasta convertirse en una auténtica publicación profesional durante los años ochenta, íntegramente consagrada a lo que más me fascina: la imaginación aplicada al cine en Súper-8, efectos especiales hechos con ingenio y paciencia —no con clics—, y stop motion con gloriosa película, una revista que respiraba  el mismo aire que siempre quise para mis películas. ¡Ay, si la hubiese descubierto cuando adolescente! Mi vida habría cambiado, probablemente. 

Como siempre, ni un sólo artículo tiene desperdicio.

Desde que descubrí "Cinemagic", me impuse la tarea —o ella me impuso a mí— de reunir la colección completaHa sido una búsqueda digna de bibliotecario monástico: lenta, silenciosa y llena de esperanza. Algunos números me llegaron como obsequios inesperados de otros cineístas generosos. Otros, cazados en ferias de coleccionismo o en rincones oscuros de eBay, a veces a precios razonables, y otras con precios dignos de subasta de manuscritos medievales.

Cenando com Will Vinton

Hace aproximadamente un año, ya creía haberlo conseguido. Tenía toda la colección… salvo el número 32. Ese número maldito se me escapó dos veces, siempre con un estadounidense más rápido o más insomne que yo, que se me adelantaba en el último clic. Hasta hace unos días cuando, de repente, una alerta, con una oferta razonable, que esta vez gané.

Tenía miedo de que se perdiese en su camino desde Estados Unidos a Galicia, en el noroeste de España, en estos tiempos de aranceles y controles fronterizos, pero ayer llegó a casa el legendario número 32 de "Cinemagic", perfectamente empaquetado, con aroma a estantería americana y promesa de lectura intensa. Lo comencé a saborear ayer mismo, durante la cena, con el mismo entusiasmo con el que de niño abría los sobres de mis primeras películas Kodachrome reveladas.

Así de bien empaquetado llegó el tesoro

Este número incluye una golosina sabrosísima:  una carta al director firmada nada menos que por Ray Harryhausen, el maestro del stop motion, el hombre que animó esqueletos mejor que nadie, era suscriptor de "Cinemagic".

Con este ejemplar, la colección está por fin completa. Y, permítame el lector, la osadía,  puede que sea la única colección íntegra de "Cinemagic" en Europa.

Ayer sí que pude dormir tranquilo. Mejor que tranquilo, diría. Porque ayer por la noche, la carta de Ray me esperaba en la cama.

Archivando el ejemplar en su tomo


domingo, 25 de mayo de 2025

ONLY SUPER 8 TELECINEMA IN 6K RESOLUTION IN GALICIA: FUMEO BY MMT – SOUL AND RESOLUTION

In a quiet corner of Galicia, in the northwest of Spain, surrounded by reels, film emulsions, and a deep passion for photochemical cinema, a unique machine has just been installed. A system that doesn’t simply scan film—it honors it, understands it, and transfer to digital with respect.

As of this week, at IB Cinema in La Corunna, we proudly host the only Super 8 (and 8 mm) telecinema with true 6K resolution in Galicia. This accomplishment has been made possible thanks to the talent and dedication of an exceptional ally: engineer Martin M. Ten, an Argentine-British designer, and one of the world’s most respected figures in narrow-gauge film telecine a technology.

Martin’s clients include professional archives and broadcasters around the globe, scattered across this vast and boundless planet. Yet, a few months ago, despite his busy schedule, he accepted a very personal challenge I proposed:

“How would you feel about designing a 6K model that, without compromising state-of-the-art technology, paid tribute to the legendary Fumeo 9131?”

That Fumeo 9131 was a key piece of equipment at IB Cinema for nearly 25 years, back when PAL video quality was more than enough for us.

My own unit, out of service since 2008 or 2009, was eventually donated to my friend Matteo Richetti. But its memory lingered... and demanded a second life.

Rather than simply modify an existing system, Martin redesigned his MMT platform from scratch, drawing inspiration from the silhouette, philosophy, and performance of the classic Fumeo 9131. He began manufacturing components over Easter, and just this past Friday arrived in A Coruña, carefully transporting every element—along with an infectious energy and enthusiasm.

From that point on, it’s been Stakhanovite days of up to 15 hours, with Álex and I working side by side with Martin. For instance, this past Saturday we labored from 7:00 AM until well after 10:00 PM. Today, Sunday, after all this shared effort, the machine is practically complete, pending only a few final software modules.

And yes—it’s a joy, and almost an act of cultural resistance, to announce that Galicia now has a telecinema capable of scanning Super 8 and 8 mm film in real 6K resolution. This Fumeo by MMT unit doesn’t just work at 6K—it can also operate in 4K, 2K, and even HD, accommodating projects with limited computing resources who may not be able to handle the massive data loads of ultra-high-resolution scans.

Just a few days ago, I cleared out our old magnetic sound recording room. From now on, that space will serve as the telecine lab—a place where every frame, even if damaged or aged, can be scanned and respected.

Because here, we do not digitize for the sake of digitizing.
We extract the essence, preserve the grain, maintain the texture—especially of color reversal originals—with a fidelity that has never before been achieved in Europe. The goal is not merely to convert film to digital, but to preserve its soul, its unique visual richness, the splendor of Kodachrome, Ektachrome 7294, or Fujichrome Velvia.

Thanks to its incredible resolution, the Fumeo by MMT allows us to retain even the tiniest detail of the film emulsion. Unlike other Spanish labs, this machine enables ultra-stable scanning of damaged or perforated film, ensuring smooth, frame-by-frame capture.

The results are so remarkable that, while the Fumeo by MMT will be primarily reserved for our own projects, we are open—on a very selective basis—to working with certain scientific, historical, or experimental archives in our region. Projects that inspire us and that deserve to be rescued with a level of fidelity previously unthinkable in Galicia. And always with in-person hand-off and retrievalno couriers involved.

This new system, developed by Martin M. Ten with extraordinary sensitivity to the Fumeo legacy, features frame-by-frame scanning, software control, optical stabilization, color processing designed for reversal film, and of course, the ability to export in RAW or ProRes, depending on project requirements.

A machine… and a manifesto.

Beyond the technical specs, beyond the formats, the Fumeo by MMT telecine is a statement of intent:
Here in Galicia, film is not just projected—it is cared for, studied, and revived.
With the tools of the 21st century, yet without betraying the artisan essence of the 20th.

And in these times of digital noise and fleeting memory, that is not just a technical achievement. It’s an act of love. And a form of resistance.

VERSIÓN EN ESPAÑOL: PULSE AQUÍ

ÚNICO TELECINE DE SÚPER-8 A 6K EN GALICIA: FUMEO BY MMT, ALMA Y RESOLUCIÓN.

En un rincón de Galicia, en el noroeste de España, entre bobinas, emulsiones y pasión por el cine en soporte fotoquímico, acaba de instalarse una pieza única, una máquina que no solo escanea película, sino que la honra, la comprende y la traduce con respeto.

Desde esta semana, en la coruñesa IB Cinema, contamos con el único telecine de Súper-8 (y 8 mm) con resolución real a 6K de toda Galicia, un logro que ha sido posible gracias al talento y la entrega de un aliado de excepción: el ingeniero argentino-británico Martin M. Ten, uno de los diseñadores de telecines para pasos estrechos más reconocidos del mundo.

Martin tiene clientes profesionales, desde archivos a emisoras de televisión,  repartidos por todo el planeta, en su inmensa e inabarcable redondez. Pese a estar tremendamente ocupado, hace unos meses aceptó un reto muy particular que le propuse:

—¿Qué te parecería diseñar un modelo de 6K que, sin renunciar a la tecnología de vanguardia, rindiese homenaje al legendario Fumeo 9131?

Aquel telecine, el Fumeo 9131, fue un referente en IB Cinema durante unos 25 años, en aquellos tiempos en los que la calidad PAL nos parecía más que suficiente.

Mi unidad, inoperativa desde 2008 o 2009,  se la doné hace unos años al amigo Matteo Richetti, pero su espíritu seguía rondando en mis recuerdos… y pedía una segunda vida.

Martin, lejos de limitarse a adaptar lo ya hecho, rediseñó desde cero su sistema MMT, inspirándose en la silueta, filosofía y rendimiento del clásico Fumeo 9131. Comenzó la fabricación de los componentes durante la Semana Santa, y anteayer viernes, por fin,  llegó a La Coruña, con todo el material cuidadosamente embalado… y una energía contagiosa.

Desde entonces, jornadas estajanovistas —de hasta 15 horas diarias— nos han tenido a Álex y a mí trabajando codo con codo con Martin. El viernes, hasta medianoche. Ayer sábado,  estuvimos desde las siete de la mañana hasta pasadas las diez de la noche. Hoy domingo, tras tanto esfuerzo compartido, la máquina está prácticamente lista, a falta de instalar algunos módulos de software.

Y sí: es una alegría —y casi un acto de resistencia cultural— poder anunciar que Galicia dispone ya de este nuevo telecine Fumeo by MMT, una máquina que no solo trabaja a 6K, sino que puede operar también en 4K, 2K e incluso HD, adaptándose a las posibilidades técnicas de cada proyecto pues no siempre, siendo independientes, nos es posible disponer de los enormes recursos informáticos que requieren el tratamiento de imágenes audiovisuales en resoluciones superiores a HD.

Hace apenas unos días, liberé la antigua sala de grabación de sonido magnético de nuestras instalaciones. A partir de ahora, este espacio será el laboratorio de telecine, un lugar donde cada fotograma, tanto los recién revelados como los dañados o envejecidos, podrá ser escaneado y respetado.

Porque en este laboratorio no digitalizamos nuestras valiosas películas por digitalizar. Aquí extraemos la esencia, conservamos el grano, mantenemos la textura de los originales inversibles en color con un nivel de fidelidad no logrado nunca antes en Europa. Nuestro objetivo no es simplemente convertir mis películas a digital, sino preservar su alma, su esencia, la belleza del colorido inversible del Kodachrome, el Ektachrome 7294 o la Fujichrome Velvia. 

La resolución del Fumeo by MMT nos permite conservar hasta el más mínimo detalle de la emulsión, algo especialmente valioso en originales inversibles. A diferencia de los telecines en otros laboratorios españoles, el Fumeo by MMT permite digitalizar con estabilidad suprema materiales deteriorados o con las perforaciones dañadas. 

El logro es tan grande, los resultados tan espectaculares, que, aunque el Fumeo by MMT lo destinaremos principalmente a nuestros propios proyectos, no excluimos abrirnos (de forma muy puntual) a ciertos archivos científicos, históricos o experimentales de nuestra región que nos seduzcan por su relevancia y que podrán ahora rescatarse con un grado de fidelidad hasta ahora impensable en Galicia, con la seguridad de la entrega y recogida en mano, sin la intermediación de mensajerías (pero, ¡ojo!, no trabajamos para particulares).

Este nuevo telecine Fumeo by MMT, único en el mundo desarrollado por Martin M. Ten con una sensibilidad extraordinaria hacia la tradición Fumeo, funciona fotograma a fotograma, con control por software, estabilización óptica, tratamiento cromático especialmente pensado para originales inversibles, y, por supuesto, con la posibilidad de exportar en RAW o ProRes según las exigencias del proyecto.

Más allá de las especificaciones técnicas, más allá de los formatos, el telecine Fumeo by MMT es una declaración de intenciones: ahora, en Galicia, el cine en fílmico no solo se proyecta, sino que también se cuida, se estudia, se revive, con herramientas del siglo XXI, pero sin traicionar la esencia artesanal del siglo XX. Y eso, en tiempos de ruido digital y memoria efímera,  no es solo un logro técnico, sino también un gesto de amor y una forma de resistencia.

ENGLISH VERSION: CLICK HERE

sábado, 24 de mayo de 2025

TIM BURTON Y EL SELLIER FILM FESTIVAL: ALIANZA EN FÍLMICO

Desde hace ya una década, el Sellier Film Festival, fiel a su compromiso con el cine de verdad, o sea, en soporte fotoquímico, mantiene una alianza entrañable y activa con otro certamen europeo igualmente singular, con el que comparte política: el festival La Nostra Memoria Inquieta, celebrado en San Giovanni Valdarno, bajo el impulso institucional tanto de su alcaldesa, Valentina Vadi como del concejal Fabio Franchi (un gran entusiasta de lo fílmico), con el buen amigo Alberto Vangelisti a la cabeza del equipo técnico.

Este verano, el festival italiano estará consagrado a la figura de Tim Burton, y lo harán como manda la pasión verdadera: al aire libre y en película, en una celebración que, para los que amamos el cine con textura, grano y alma, se convierte en una cita ineludible.

Para hacer posible esa programación, he tenido el placer y el desafío de colaborar, desde el Sellier Film Festival,  localizando varios positivos en 16 mm de títulos clave:
"Ed Wood";
"Frankenweenie" (el mediometraje original de 1984); 
"Vincent" (el cortometraje gótico y poético que inauguró el universo Burton).

"Vincent", custodiado ya en su lata

Buscar títulos en digital es una tarea trivial hoy en día, al alcance de cualquiera. Encontrarlos en película es otro cantar: muchas veces, ni siquiera los propios titulares de los derechos disponen ya de positivos fotoquímicos para exhibición. Pero después de décadas de coleccionismo cinematográfico auténtico, en fílmico,  uno ha ido tejiendo una red global de contactos, capaz de responder incluso a los retos más improbables.

Gracias a esa red, el pasado diciembre conseguimos, para el Sellier Film Festival de La Coruña, llevar a cabo la retrospectiva en fílmica más completa sobre Hammer Films jamás realizada fuera del Reino Unido.
Y para la próxima edición, cuya preparación comenzó en Semana Santa, nos lanzaremos a otro reto mayúsculo: una retrospectiva Tex Avery, con raros títulos de época, sin censura y en sus versiones originales.

Volviendo a Tim Burton en el festival italiano, tanto "Vincent", como "Ed Wood" y "Frankenweenie", están localizados con sonido óptico en inglés y pista magnética en castellano. En otra pista magnética, Alberto y su colaborador, el competente Guido Melis, llevarán a cabo una labor paciente y precisa de sincronización de doblaje al italiano sobre la pista libre: un trabajo que conjuga artesanía y dominio técnico, en perfecta sintonía con el espíritu de Burton y con la filosofía compartida entre ambos festivales del cine como un arte tangible.

Estuve muy preocupado con "Vincent" pues aunque, en este caso, el positivo se archiva aquí en La Coruña, en la Cinemateca del Sellier Film Festival, ¡su lata estaba vacía! Al final, apareció empalmado, como complemento de "La niebla", de Carpenter, en un hallazgo casi por azar divino. Ya está en su lata y, en breve, saldrá para Italia.

La Nostra Memoria Inquieta, al igual que el Sellier Film Festival,  proyecta exclusivamente en 35 mm, 16 mm y Súper-8. Para lo digital, ya están los demás festivales. Para nosotros, la luz debe seguir  atravesando la película, a 24 fotogramas por segundo. 

viernes, 23 de mayo de 2025

VAMPIRISMO GUBERNAMENTAL PARA UNA HEMBRA

Hay sesiones de cine que se recuerdan por una buena proyección... y otras, por los sobresaltos técnicos que casi la impiden. El año pasado, para la sesión inaugural del Sellier Film Festival, con películas de Carlos Fernández Santander a 18 fotogramas por segundo, llevé el proyector Fumeo 9140 equipado con una lámpara Marc 300 recién instalada. Todo  estaba listo para una sesión impecable.

Pero cometí un error: cuando puse la lámpara nueva, no la conecté bien.

La Marc 300 se enciende con una descarga de miles de voltios. Al no hacer buen contacto, se formó un arco eléctrico que quemó la clavija hembra del proyector.

Afortunadamente, logré salvar la proyección in extremis, desmontando el enchufe y sustituyéndolo por una simple ficha

Este tipo de conector específico para la Marc 300 sólo lo fabricó General Electric, una empresa que ya no existe. Lo busqué durante meses por canales alternativos, hasta que por fin encontré uno en EE.UU., por 25 dólares.

¡Qué alegría tuve!, hasta que llegó el paquete.

Mi sorpresa fue tener que pagar impuestos de importación por valor de 24,60 €. Unos 4 € eran de IVA. El resto, mas justicación que el concepto de "extracargos". ¿Cómo puede el Estado confiscarme de mi dinero, que me pide  en metálico, una cantidad similar la valor de lo adquirido? 

Esta voracidad fiscal sin mesura, no se compara ni con la de los señores feudales. Si no fuera porque es una pieza muy dificil de obtener, se la dejaría a ellos para que se la comiesen con patatas.   

Lejos de, por ejemplo, felicitarme, por mantener viva, en el ámbito cultural, la tecnología fílmica, de forma casi arqueológica, en España, no recibo mas que sopapos de las administraciones públicas. Pero voy a seguir en la lucha. Ya no sólo es una resistencia técnica, sino también una batalla contra el vampirismo burocrático.

Potencia soberbia de la lámpara Marc 300 para Súper-8 y en una sala sin oscurecimiento total


lunes, 19 de mayo de 2025

"SUPEROCHEROS" NÚMERO 6: UN HOMENAJE IMPRESCINDIBLE A DERANN FILMS.

Desde su refugio cinéfilo, en un remoto lugar del norte de España, Aser Queipo sigue manteniendo una tradición: editar "Superocheros", una publicación dedicada al cine en paso Súper-8. Llamarla “fanzine” sería quedarse muy corto. Estamos hablando de una revista impresa en offset, a todo color, en papel couché de altísima calidad, en lo que es un acto de "sibaritismo" para los amantes del cine en fílmico y, mas específicamente, del Súper-8.

Recién recibido el número 6, no se exagera si se lo califica como un documento imprescindible, no solo para coleccionistas, sino también para cualquier cinéfilo con interés en la arqueología cinematográfica.

Este número está íntegramente dedicado a Derann Films, la legendaria distribuidora británica que, contra viento y marea, mantuvo vivo el tiraje en Súper-8 de largometrajes completos hasta su cierre en 2011, en un acto de amor al cine que merecía, sin duda, este estudio minucioso.

La revista no solo recopila todos los títulos lanzados por Derann, sino que incluye un detalle que hará las delicias de muchos: la reproducción de las carátulas originales con las que se distribuían las películas. Y eso es especialmente valioso para quienes, como yo, cometimos el error —por razones de espacio— de deshacernos de los envases originales al reembobinar los filmes en bobinas grandes de 800, 1.400 o incluso 2.000 metros.

Superocheros Nº6 no es solo un catálogo ni una guía. Es un documento histórico que resalta hasta qué punto el Súper-8 fue y es un formato vivo, profundantemente amado, y, por tanto, un bien coleccionable sólo comparable al de las ediciones en 9.5mm

Si usted está leyendo esta bitácora, "Superocherosmerece un hueco en su estantería… y en su corazón (se distribuye también en alemán). 

Las suscripciones a "Superocheros", así como la solicitud de ejemplares sueltos (sólo 10 euros + gastos de envío), se pueden gestionar escribiendo a s8films@hotmail.com  

¡Debe ser "Superocheros" la única revista la única del mundo que sigue conservando una cuenta en Hot Mail!, desde los primeros tiempos de Internet.



domingo, 18 de mayo de 2025

IX SELLlER FILM FESTIVAL: TEX AVERY, 90 AÑOS DE GENIALIDADES ANIMADAS...¡EN FÍLMICO!

Este diciembre volverá el SELLIER FILM FESTIVAL con su novena edición, fiel a su compromiso con la restauración y la exhibición del cine de verdad, en fílmico, con película,  y la reivindicación de obras que, por una u otra razón, se han vuelto invisibles para el gran público. Si el año pasado conmemoramos el 90 aniversario de Hammer Films con una programación de títulos alguno de ellos inéditos, en pasos fílmicos, en nuestra patria, este año cargaremos las bobinas del proyector cinematográfico con las obras de un nombre que revolucionó la animación y rompió todas las reglas: Tex Avery.

En 2025 se cumplen 90 años del primer cortometraje dirigido por Avery, y en el IX Sellier Film Festival queremos celebrarlo con una retrospectiva cuidadosamente selectiva, íntegramente en pasos de 16 mm y 35 mm, que incluirá tanto su primer trabajo como director, de 1935,  como su último trabajo para televisión, y, por supuesto, todos los títulos más emblemáticos y salvajes de su carrera, esos en los que los ojos saltan, las mandíbulas caen al suelo, y los personajes desafían las leyes de la física y del sentido común.

Pero en el Sellier no nos quedaremos con lo políticamente correcto: proyectaremos también aquellos cortos que  hoy en día son difíciles, si no imposibles, de ver íntegros por su incorrección política o su representación de estereotipos que el paso del tiempo ha dejado atrás. No por polémica, sino por rigor histórico cinematográfico y con el contexto que merecen, porque borrar no es lo mismo que comprender. La idea es ver a Tex Avery en toda su dimensión, sin filtros ni censura, tal como fueron concebidas sus películas: en fílmico, con grano, con alma y con carcajadas estruendosas de una sala a rebosar de público.

La animación clásica nunca fue tan moderna, ni tan transgresora, como cuando la dirigía Avery. Si usted es un entusiasta del cine de animación para adultos, si usted es capaz de discernir que lo fílmico tiene una textura que ningún pixel puede replicar, o si simplemente quiere reirse como un lobo aullador frente a una pin-up girl animada... reserve ya diciembre en su calendario: 5, 6, 7 y 8; destino: LA CORUÑA.

Naturalmente, el Sellier Film Festival prosigue con sus secciones habituales, como el Certamen Internacional Sellier de Cine en Súper-8 o el Premio Sellier de Cine, que este año se dedicara a Fernando Arenas con la recuperación de sus filmaciones coruñesas con mas de medio siglo que sorprenderán a mas de uno. 

Durante este verano se irá desvelando la programación completa. Por ahora, sólo podemos decir una cosa: ¡Eso es todo, amigos... por el momento! 

  • Si usted no conoce el SELLIER FILM FESTIVAL, lea el resumen ejecutivo de la pasada edición PULSANDO AQUÍ

sábado, 17 de mayo de 2025

DÍA DAS LETRAS GALEGAS CON FOTOGRAMAS GALEGOS

Nesta xornada festiva en Galicia, na que celebramos o Día das Letras Galegas —unha conmemoración cultural instaurada no ano 1963, cando D. Manuel Fraga era ministro de Información e Turismo—, queremos tamén render homenaxe a outras letras: as que se imprimen, con luz e gran, en cada fotograma do cine artesanal.

E é que, neste último trimestre, completamos tres novos opus fílmicos en Súper-8:
"Elegía al plumacho"
"Bueno y generoso D. Manuel, In Memoriam"
"Eoghan Neff & Anxo Lorenzo Unit"

A fotografía do cartel e unha diapositiva Kodak Ektachrome

Aínda que o paso e Súper-8, foron en realidade filmados con cartuchos Single-8, un sistema xaponés xa desaparecido, con película Kodak recargada manualmente en cartuchos reutilizados, na escuridade total, e aproveitando anacos de producións anteriores gardados no conxelador. Un auténtico acto de resistencia técnica e poética.

"Elegía al Plumacho" en LA VOZ DE GALICIA

Todo o proceso de revelado realizámolo na Coruña, de maneira totalmente artesanal, coa valiosa axuda de Álex, o meu colaborador habitual.

Por motivos de difusión, dous dos opus están escritos en castelán, mentres que o terceiro conta con audio en inglés.

Onte mesmo chegou da imprenta o cartel de Elegía al plumacho. A diferenza das producións dixitais subvencionadas —ateigadas de logotipos oficiais e selos institucionais—, este cartel só leva o nome das persoas e empresas privadas que realmente colaboramos no proxecto.

Diapositiva Kodak Ektachrome 6 x 6

Nin un só céntimo provén de subvencións públicas. Cremos firmemente que os cartos do contribuínte deberían destinarse a fins esenciais, como a atención ás persoas maiores ou a protección das fronteiras, e non a alimentar circuítos clientelares da cultura oficialista.

Grabando o son (Kodak Portra 400)

Ademais, coa colaboración do galego SELLIER FILM FESTIVAL, organizamos tamén —de xeito totalmente voluntario e sen ningún tipo de subvención— un obradoiro de iniciación ao cine en Súper-8, incluíndo o revelado químico nas nosas instalacións coruñesas, para o alumnado da Escola de Imaxe e Son da Coruña, baixo as ordes do profesor Carlos Oro. Foi unha experiencia enriquecedora e única para as persoas participantes, que descubriron que aínda hai vida —e moita beleza— máis alá do píxel.

ELEGÍA AL PLUMACHO (Kodak Ektachrome, Fuji ZC1000N) 


EOGHAN NEFF & ANXO LORENZO UNIT   (Kodak Vision 200T e Kodak TriX, Fuji ZC1000N e Fuji P2WA) 

BUENO Y GENEROSO D. MANUEL, IN MEMORIAM (Fujichrome Velvia, Fuji ZC1000N) 


OBRADOIRO LUMIÈRE NA ESCOLA DE IMAXEN E SON (Kodak Ektachrome, Bauer C900)