TOPOS: LA ÚLTIMA PELÍCULA CON ELLOS EN EUROPA

Se denominan "topos" a unas marcas colocada en la esquina superior derecha de un fotograma de la película de cine, al final de cada rollo de exhibición. Soy, actualmente, el único director de cine, en Europa continental, que los usa.

¿Para que sirven los "topos"? Las películas de cine (no los audiovisuales en digital) se distribuyen divididas en varios rollos que duran entre 10 y 20 minutos cada uno.  Los "topos" aparecen en los últimos segundos de cada rollo. El primer "topo", conocido como señal de motor , se encuentra a unos 8 segundos antes del final del rollo. El segundo "topo", conocido como señal de cambio , debe estar aproximadamente un segundo antes del final. 

Cada "topo" tiene una duración de 4 fotogramas, con exactamente la siguiente ubicación siguiendo la regla 301 de la SMPTE:

Uno de los "topos" de "Spitsbergen, O Gardián do Ártico!

1) Cuatro "topos" para la señal de motor, entre 198 y 195 fotogramas antes del último fotograma del rollo.

2) Tras 172 fotogramas del último "topo" de la señal para el motor, otro cuatro "topos" para la señal de cambio, esto es, entre 21 y 19 fotogramas del último fotograma del rollo. 

Los "topos" son fundamentales cuando se proyecta una película con un sistema de doble proyector, procedimiento ahora exigido por los Estudios para las costosas copias cinematográficas, pues, desde hace unos años, NO PERMITEN BAJO NINGÚN CONCEPTO CORTAR EL LÍDER DE PRINCIPIO NI LA COLA DE FINAL.

Un director cinematográfico debe tener siempre en cuenta que el último plano de rollo debe ser o mas largo de lo habitual, o de recurso, sin diálogo al final, pues en muchos festivales en los que no se proyecta con el obligatorio sistema de doble proyector, los malos operadores, sin oficio ni cualificación, tienen la mala costumbre de cortar uno o dos fotogramas de final de rollo para montar la película en los "platos" de largometraje. Esto significa que si una misma copia tiene que trotar por varios festivales, como es el caso de "Spitsbergen, O Gardián do Ártico", pueden llegar a faltarle dos o tres segundos de metraje al final de cada rollo.

Si bien soy el único de Europa continental que mantiene el uso de los "topos", no ocurre lo mismo en Inglaterra, con Kenneth Branagh y Christopher Nolan, entre varios otros, conocedores de los entresijos de su profesión y respetuosos con el legado cinematográfico de los que le precedieron.