Aunque la focal normal de los proyectores Fumeo de 16 mm es de 50 mm, todos mis aparatos se encuentran equipados con el zoom Fumeo (hecho por Kern en Suiza) de 32 a 65 mm (en realidad, 35 a 65mm). A veces, en salas de tamaño reducido es necesario una focal mas grande, y, en este caso, el zoom Fumeo de 25-45 mm sirve para salir de cualquier apuro.
Isco 10 mm en el proyector y Sankor de 25 mm en la mano |
Sankor de 25 mm cortado: ¡un objetivo invisible! |
UN OBJETIVO INVISIBLE. Gracias a esta intervención quirúrgica, sin necesidad de alejar el proyector de la pantalla, puedo proyectar en una pantalla muy grande, con luminosidad y sin sombras, con nitidez de borde a borde. Lo gracioso de todo este asunto es que, como ahora, desprovisto de su frontal, la lente se encuentra escondida por completo dentro de la cabeza mecánica, ¡¡¡parece como si el proyector estuviese proyectando sin objetivo!!!
Hay ocasiones, en retroproyecciones por ejemplo, que se necesita un objetivo todavía mas extremo: es el turno del Isco ¡¡¡de diez milímetros!!! (suministrado por Marco Sonetti). El Isco de 10 mm, sin embargo, no se puede usar con la gama halógena de Fumeo, pues el haz de luz expande antes de que termine el cuerpo frontal del propio aparato: sólo se puede emplear con los Fumeo profesionales de xenón, o el VI, en los que la cabeza mecánica va totalmente a proa.
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