Pero la manufactura de una película en color de alta calidad es algo que, en la actualidad, sólo pueden lograr dos firmas en todo el mundo: Kodak y Fujifilm. La tarea se complica mas si la película en color es inversible, en lugar de negativa, esto es, la que proporciona una imagen positiva tras el revelado.
Una película inversible como la nueva Kodak Ektachrome está compuesta de unos ochenta ingredientes aplicados en proporciones ultraprecisar y superuniformes en la base transparente. En esencia, son tres emulsiones diferentemente sensibilizadas, cada una de un grosor milimétrico, aplicadas una encima de la otra sobre el soporte, con capas filtrantres adicionales entre ellas.
Así como en el antiguo Kodachrome los copuladores de color apropiados para formar colorantes se introducían durante el revelado, en la nueva Ektachrome se encuentra en las capas de emulsión en el momento de la exposición, de forma que el revelado es mucho menos complejo.
Los secretos de su fabricación se encuentran plasmados en el libro "Making Kodak Film". Hace unos años, la información que se desvela ¡sería alto secreto! Sólo el presidente, en Kodak, conocía todas las partes del proceso. Pero ahora, con los vientos digitales, a ninguna compañía de las que fabrican blanco y negro, para un mercado pequeño (aunque creciente) le saldría rentable reunir los enormes recursos que necesita una fabricación de película de color de alta calidad, con la información que se revela en este libro que es imprescindible para todo cineísta.
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