viernes, 31 de agosto de 2018

SPITZBERGEN: EL GUARDIÁN DEL ÁRTICO. En Súper-8 4K de Kodak. Cuaderno de bitácora número 16.

¡AUXILIO EN HELICÓPTERO!
Lo mañana del martes ocho, que se presentaba tranquila, de repente se vió ensombrecida cuando, en una misión de reconocimiento, la zodiac de Svein y Kanuk, que había descubierto un nido de focas, con Kanuk ya sobre el hielo, fue mordido por un macho inusitadamente agresivo. Después de más de dos horas a intemperie, con viento inclemente, dado que una inmensa banquisa flotante se había interpuesto entre el rompehielos y la zodiac, una vez a bordo, y tras unas curas de urgencia, por precaución, el capitán Viktor Karlsson, además de dar aviso a la gobernadora, pidió el helicóptero de salvamento, para vacunar a Kanuk contra la rabia y el tétanos. La rabia, desgraciadamente,  ha llegado al Ártico para quedarse: en Spitzbergen se han dado detectado casos no sólo en focas, sino también zorros y ¡hasta en los renos! (nada menos que los de Papá Nöel, quien, según la tradición, tiene aquí su fábrica de juguetes aquí). Si un humano contrae la rabia y no se trata, la posibilidad de muerte es de un cien por ciento.
DERROTA EN UN MAR HOSTIL.
La jornada anterior, recordará el lector que, posteriormente a nuestras filmaciones en el nido de las focas y la guarida de las morsas, una tormenta de nieve nos dejó medio desorientados, teniendo que volver a las zodiacs bordeando la línea costera; encaramos rumbo al “Malmö” con enormes dificultades debido al fuerte viento y el mar encrespado. Tal vez sea menester recordar que, en estas latitudes, las brújulas no funcionan;  fuera de la lejana “capital” de 2.000 habitantes, Longyearbyen, tampoco hay cobertura con el móvil: nuestra única conexión con el mundo es el sistema de radiotelegrafía del rompehielos “Malmö” y el teléfono vía satélite Iridium de Svein Wik.
El extremo mas meridional del fiordo Raudfjorden ya hemos relatado, en la entrega precedente, que se encuentra subdivido en otros dos más pequeños, el oriental Klinckowströmfjorden,  en el cual vivimos la aventura del lunes, y el occidental, Ayerfjorden , separados por la alargada península de Buchananhalvoya. 
Como la zona es propicia para encontrarse con vida (desde osos polares hasta, incluso, renos), Svein se resistía a abandonarla, de forma que el capitán trazó una derrota que la circunnavegaría con una velocidad de muy pocos nudos. El lunes concluyó con un tiempo infernal: ¡cuánta razón tenían los antiguos griegos cuando conjeturaban que estos lugares, de existir, serían totalmente inhumanos, no sólo para vivir, sino incluso meramente para viajar por ellos!
PROYECTO EKTACHROME.
De los 13 exploradores embarcados en el "Malmö", sólo cuatro estábamos implicados en el proyecto Ektachrome de Kodak. Tras las cena de las siete, en la sala de reuniones, esa velada fue mi turno para explicar en qué consistía el Súper-8 y las enormes posibilidades que se abrían a un paso cinematográfico que, nacido hace mas de medio siglo para el mercado masivo, en la actualidad, gracias a la posibilidad de su digitalización a 4K,  ha encontrado su hueco en el terreno profesional, educativo y artístico. Al final de esta entrada, el lector interesado, podrá leer, de forma resumida, el contenido de mi charla.
EL “MALMö” SE ADENTRA EN EL FIORDO AVERFJORDEN EN BUSCA DE RENOS.
Después del desayuno de las ocho de la mañana, el martes,  justo tras doblar el borde norte del cabo de Buchananhalvoya, las aguas de este "fiordo dentro de un fiordo" se tornaron extremadamente tranquilas (si bien, en el Ártico, reiteramos, siempre hay que estar preparados para lo peor).
Se arrió una zodiac con la que Svein y el explorador inuit Kannut Lennert bordearían la costa en busca de vida mientras que el “Malmö” proseguía con su navegación más al sur con, una vez mas, el doctor Audun Rikardsen como vigía.
En nuestro avance, nos volvimos a topar con hielo: primero fragmentando y, después, una inmensa banquisa helada que la proa del “Malmö” rompía sin dificultad. Su extensión la hacía parecer como una prolongación de tierra firme.
Esta banquisa, desprendida de la costa, es como si tuviese vida propia pues, tal vez por la corriente,  navegaba en dirección contraria a la del rompehielos. Como en otras ocasiones, desde popa, gustaba uno de disfrutar del espectáculo del surco que el “Malmö” iba dejando a su paso, una especie de autopista de hielo fragmentado.
La pureza nívea de estos paisajes me han fascinado desde la adolescencia, pese a su desolación y aislamiento, cuando devoraba los libros con las gestas de conquistadores del ártico como Peary y Bird. En la biblioteca de casa conservo todavía alguno de aquellos clásicos publicados por Editorial Juventud, bien visibles por su lomo amarillo, como el del general Umberto NobileAlas sobre el Polo”; o  Emersión en el Polo”, del comandante Calvert; y “Nautilus 90º Norte”, la hazaña del comandante Anderson a bordo del submarino de mítico nombre que justo este mes de agosto de 2018 cumple 60 años, y que, por tal motivo, he releído, algo más de ¡cuarenta años! después de haber comprado el libro en la antigua ubicación de la coruñesa Librería Arenas, casi pegada al añorado Cine Avenida.  
Sorprende que en un submarino atómico se emplearan en la reparación métodos "caseros" (sic): "Media docena de marineros vestidos de paisano bajaron a tierra y trajeron a bordo ciento cuarenta botes de litro de "tapagrietas". Bajo la supervisión de Early se vaciaron la mitad en el interior de los condensadores.¡Qué espectáculo! Todo un submarino de propulsión nuclear, cuyo coste había sido de cien millones de dólares; el barco de concepción mas atrevida de la historia naval de todos los tiempos, y el bueno de Early y sus hombres vaciando en su maquinaria un vulgar líquido "tapagrietas" que costaba un dólar y ochenta centavos. Mas para nosotros no era una cuestión jocosa, sino un asunto muy serio. Nada menos que la misma travesía polar era lo que estaba en juego".
Toda una paradoja pensar que, cuando el comandante Anderson estaba atravesando el Polo Norte bajo el casquete polar en 1958 en el “Nautilus”, nuestro querido rompehielos “Malmö¡¡¡era todo un veterano,  con 15 años ya en estas aguas!!! Como le gustaba repetir al capitán Karlsson: “Ay si sus mamparos hablasen…” (desde buque al servicio del III Reich hasta suministrador de acetileno para los faros árticos o embarcación para cazadores de morsas y osos, entre otras actividades, antes de alcanzar su estatus de navío histórico).
ATACADO POR UNA FOCA RABIOSA.
Mientras Audun, desde el carajo de la verga de proa del “Malmö”, oteaba el horizonte en todos los puntos cardinales, ayudado por Delphine Dupré, la amazona del Ártico, sobre el puente de mando, Svein y Kanuk recorrían, en la zodiac, calas y recovecos de la agreste costa en busca, sobre todo, de focas y morsas.
En la jornada del día anterior, cuando la nevada se intensificó, y la colonia de morsas decidió arrastrarse al agua, ya pudimos ver, en las imágenes filmadas, que sus movimientos, en tierra, son dificultosos (aunque la precaución nunca debe relajarse pues, según Audun, puden ser sorprendentemente rápidas).
Muy distinto, y letal, es su comportamiento en el océano. Si una morsa ataca una zodiac las posibilidades de supervivencia son mínimas. Por ello, frente a la isla Moffen, cuando tuvimos la fortuna de maravillarnos con la danza nupcial de una pareja de morsas, en las dos zodiacs íbamos fuertemente armados pues, incluso una morsa amistosa, dada su enorme envergadura, puede hundir cualquier embarcación pequeña. Lo más prudente es, siempre, como habíamos hecho ayer: desembarcar a una distancia prudente y acercarse sigilosamente desde tierra.
En su exploración de hoy, con Kanuk fuera de la zodiac con agua hasta las rodillas,  cerca de otro nido de focas, que normalmente son inofensivas, una de ellas, un macho agresivo, surgió como una exhalación espectral y, de un brinco, mordió el brazo derecho de Kanuk: pese a los tres capas de aislante y a su ropa polar, la sangre comenzó a brotar.
Svein dió avisó inmediatamente al “Malmó” por el transmisor portátil “walkie talkie”. El capitán Karlsson suspendió las actividades previstas y cambió el rumbo del “Malmö” para reunirse en un punto de la bocana del fiordo con la zodiac. 
El rescate habría sido rápido… de no tener que abrirnos paso rompiendo el hielo de la colosal banquisa flotante que, en su deriva, volvió imposible encontrarse en el punto inicialmente previsto.
EL POCO CONOCIDO PELIGRO DE LAS MORDEDURAS DE FOCAS.
Actualmente, los mordiscos de foca, como también los de zorros árticos y los de renos, pueden significar un peligro de muerte pues la rabia, por desgracia,  ha llegado a Spitzbergen a través de las Tierras de Francisco José, de soberanía rusa.
Kanun, como ya conoce el lector habitual de esta bitácora, es de etnia inuit, que es como se conocen en Groenlandia a los esquimales (si bien su padre es de ascendencia danesa). Su infancia en Groenlandia discurrió entre la influencia de la metrópoli europea y su sangre indígena. Si los europeos no podemos, legalmente, matar osos polares, morsas o focas, salvo en defensa propia, ello es posible, sin embargo, para los inuit o sus congéneres en el Viejo Continente, ahora denominados sami. Gentilicios como lapón, o el genérico esquimal, que, en el lenguaje de los indios significa “comedor de carne cruda”, son peyorativos para ellos. Si el cambio climático y la contaminación representan un peligro para la fauna ártica, para las etnias humanas de estos confines, ya sean inuit o sami, existe otro: la globalización y un estado ominpresente que los subsidia de forma que pueden vivir sin trabajar, lo que origina que muchos caigan en el alcoholismo u otras drogas peores, anteriormente desconocidas.
Mientras, como nos relataría después, Svein ayudó a subir a Kanuk a la zodiac y alejo ésta de la costa y el hielo, al tiempo que Kanuk se desvestía de su parte superior con una temperatura inferior a -10 Celsius. ¡Menos mal que no nevaba, granizaba o llovía!, y la superficie del agua estaba como un plato, pues de este modo Svein pudo dejar la zodiac al pairo para así efectuar las primeras curas con el pequeño botiquín. En teoría, habría que limpiar la herida con agua, pero como el botellín estaba congelado, Svein lavó la mordedura de foca con una solución de alcohol y yodo, de forma tan minuciosa que necesitó unos quince minutos.

El “Malmó”, abriéndose camino entre la banquisa helada, como puede verse en el vídeo a baja resolución obtenido grabando de la pantalla con el móvil el bruto de Súper-8,  consiguió llegar hasta la posición de la zodiac. Ya con Audun y Kanuk a bordo, comunicaron la incidencia a la oficina de la gobernadora (Sysselman).
Svein, por supuesto, no desconocía que, ante un ataque a un humano, hay que sacrificar de inmediato a la bestia agresiva y recuperar el cadáver para su estudio: en este caso fue, sin embargo, imposible,  pues la foca se sumergió tan rápidamente como había emergido, y, después, no le fue posible identificarla con el resto del grupo. ¿Sería portadora de la rabia?
Como probablemente así fuese, lo que explicaría su agresividad injustificada, aunque Kanuk estaba vacunado contra la rabia y el tétanos, dado que en la expedición contábamos con el seguro especial para cubrir no sólo tratamiento médico sino también el desplazamiento del helicóptero SAR, la gobernadora, de poder omnímodo, ordenó el desplazamiento de la aeronave.
QUO VADO?: UN ESPAÑOL EN EL ÁRTICO.
En estas latitudes, un seguro para viajes normales no cubre los costes del desplazamiento de un helicóptero para búsqueda y rescate (SAR), un servicio del cual en España se abusa alegremente olvidando que el dinero del contribuyente es de todos. 
En Spitzbergen, sin seguro, el helicóptero no despega. Es más, a veces no basta sólo con exhibir el número de póliza sino que, dependiendo del país, la gobernadora ¡exige el depósito de una cantidad a cuenta! 
Con esta concienzuda administración, ¿a alguien le extraña que las cuentas del estado noruego sean una de las más saneadas del mundo? Mucho político español tendría que tomar lecciones aquí. Hasta se podría filmar una película, del estilo de “Quo vado? Un italiano en Noruega”, pero teniendo como protagonista a esa ministra socialista que asevera que “el dinero público no es de nadie”.
El servicio SAR noruego dispone, en la base de Longyearbyen, de dos helicópteros, un Superpuma, capaz de transportar a 18 personas, y otro mas pequeño (que, entre otras cosas, emplea la gobernadora para ciertos recorridos ofciales, en un comportamiento que es fuertemente criticado aunque tolerado mientras la cuenta la paguen no los residentes sino desde Oslo). El Superpuma, que entró en servicio en 2014, ha realizado desde entonces innumerables operaciones de búsqueda y salvamento, a menudo llegando a sitios tan alejados de su base como el norte de Groenlandia o las Tierras de Francisco José.
Como el seguro de esta expedición “era de los buenos”, desde el pequeño centro médico de Longyearbyen (con sólo dos o tres doctores y otras tantas enfermeras), un médico y un enfermero partieron en el Superpuma para revisarar la herida de Kanuk.
¡HELICÓPTERO DE RESCATE!
El capitán del "Malmö" acordó, con la base SAR,  encontrarse con el helicóptero en dos horas treinta minutos, en un punto de mar abierto, al norte del pequeño archipiélago de Nordvestoyane. A toda máquina, el veterano “Malmö”, en esta singladura de su 75 aniversario, tampoco falló: ¡llegamos a la posición acordada minutos antes de que lo hiciera el Superpuma!
Todo un espectáculo ver cómo, en medio de estas aguas aceradas, de crestas blancas, el médico y su enfermero descendían a la proa del “Malmö”. Según nos enteraríamos después, el doctor estimó que no era necesario evacuar a Kanuk. Le cosieron unos puntos en condiciones, lo vendaron y dado que Kanuk estaba inmunizado contra la rabia, (pues, como buen inuit,  había sido vacunado), ahora solo necesitaría dos nuevas dosis: la que le acaban de inyectar y otra que recibiría una vez en Longyearbyen. Gracias a su vacuna prematura, Kanuk se vería libre de ser tratado con un rosario de inyecciones, incluyendo la de inmunoglobuna contra la rabia, obligatoria, además de las vacunas,  si no estuviese inmunizado.
El enfermero fue el primero en encaramarse al helicóptero, seguido del doctor,  que nos regaló, a los que estábamos en cubierta, con un par de piruetas en el cable, probablemente para alegrarnos de una mala noticia.
REGRESO ADELANTADO.
Al final, afortunadamente, lo de Kanuk no quedó más que en un susto para él, y en una experiencia para el resto del grupo, que pudimos comprobar la enorme eficacia del servicio SAR de Spitzbergen en un Oceáno Glacial Ártico cuyas aguas pueden ser calificadas de cualquier cosa menos amigables.
La mala noticia, es que el incidente motivo que el capitán Viktor Karlsson se viese en la tesitura de adelantar el regreso en unas pocas horas con respecto al cronograma, a fin de que Kanuk pudiese estar en el pequeño hospital de Longyearbyen a las ocho de la mañana del jueves.
Ese ocaso sin noche, comenzó a nevar copiosamente, tal vez como presagio del espectacular fiordo helado que veríamos en la jornada siguiente.
SUPER-8 RENAISSANCE
En mi charla del lunes tras la cena, puse de relieve que el "renacimiento del Súper-8" se materializa con la disponibilidad, por parte de Kodak, de las tres películas negativas mas acreditadas de Hollywood (la Vision 50, la 200 y la 500), el permiso de Fujifilm para comercializar la Provia en Súper-8, y, sobre todo, por la inminente aparición de una emulsión inversible en color de calidad suprema, la totalmente nueva Kodak Ektachrome 7294, cuya primera versión de preproducción se probaba a bordo.
La nueva Ektachrome 7294, la única inversible de color diseñada con tecnología del siglo XXI y cuyo desarrollo ha prácticamente culminado en el momento de escribir estas líneas (su versión final ha sido probada durante este mes de agosto en la ciudad gallega de Ferrol, por primera vez en Europa), es la culminación de una inversión, por parte de Kodak, de millones de dólares.
Este renacimiento es debido, en buena parte, a la aparición de equipos que permiten digitalizar el Súper-8 en calidad de hasta 5K, permitiendo su difusión universal. ¿Quien lo habría augurado hace unos pocos años? El Súper-8, aunque nunca se llegó a ir del todo, ha regresado para quedarse, como ocurre con los discos de vinilo, la fotografía instantánea tipo Polaroid, las transparencias (diapositivas en película) y tantas otras tendencias con curva de ventas ascendentes desde 2015 y con interés creciente por parte de clientes ajenos al medio.
SUPER8 Y VIMEO.
Incluso en la era en la que el Súper-8 era un producto para las masas, existió cine de autor que filmaba en el mas estrecho de los pasos cinematográficos (por causas cuyo análisis serán objeto de estudio en otra entrada). 
Sin embargo, en aquellos tiempos, las obras solo llegaban, salvo contadas excepciones,  a unos pocos cientos de espectadores en distintos festivales mundiales. 
La digitalización en alta calidad e Internet lo ha cambiado todo. La difusión en Youtube es inimaginable; la prueba es el cine clip en Súper-8 de Maríah Carey "All I Want for Christmas is you", con sus mas de ¡¡¡400!!! millones de espectadores desde su sitio legal: 
https://www.youtube.com/watch?v=yXQViqx6GMY
Youtube se ha convertido en la mayor plataforma actual para la difusión audiovisual, hasta tal punto que muchos receptores de televisión inteligentes incorporan de fábrica su icono en el menú visible en pantalla. 

A la eclosión de la difusión de audiovisuales en Interne ha contribuido la proliferación, durante el último lustro, de los teléfonos inteligentes: cualquier usuario puede ver una creación audiovisual desde su móvil. Y  algunos terminales sorprenden por su calidad de imagen.
¿Es Youtube la panacea para todos los creadores? No para un pequeño segmento: el que sigue filmando con película, ya sea en Súper-8 o en 65 mm. 
Para una buena parte de los creadores que se sirven del soporte argéntico,  Vimeo es una opción mas deseada, pues, dada su menor compresión, permite atisbar mejor que Youtube el origen fotoquímico de las imágenes, incluso para las retinas menos cultivadas. Pero hay más ventajas. Ya las detallaremos en otra ocasión.
ABRUMADOS POR EL AUDIOVISUAL: LOS 10 SEGUNDOS CRÍTICOS.
Cada semana, se publican en Internet tantos millones de horas de audiovisuales que nadie tiene tiempo para consumir ni una mínima parte de los contenidos. Es tal el alud, incluso de grandes producciones televisivas, que hasta uno, que como profesional del sector tiene que estar al corriente hasta de las series mas rastreras, se ve obligado a ver determinadas producciones en la modalidad de avance rápido.
En este contexto, la creación en Súper-8, si se publica en Vimeo, de forma que se pueda restituir, en la medida de lo posible, la sensación orgánica del fotoquímico, es algo que llama la atención y sirve para distinguir la obra en medio de ese maremágnum digital que más que una oferta es una diarrea, el súper-8, con su peculiar textura,  ayuda a superar esos diez primeros segundos críticos en los que el espectador decide si prosigue con el visionado (cada vez en mayor medida desde algún teléfono o dispositivo portátil).
Esta es una de las razones por la que el Súper-8 se encuentra en alza, entre otras que ya iremos desgranando.
LA IMPORTANCIA DEL SÚPER-8 PARA FORMAR A LAS NUEVAS GENERACIONES.
Los sistemas de registro digital de la imagen en movimiento proporcionan una calidad muy buena, son baratísimos, rápidos y permiten que la creación de una obra audiovisual esté al alcance de cualquiera. Esto, que se había considerado una democratización del audiovisual, se ha convertido, sin embargo, en su fosa: resulta materialmente imposible estrenar todo lo que se graba;  cada mes,  se suben a Internet millones y millones de grabaciones que pocos verán. En los festivales, ocurre lo mismo: es tal la avalancha de inscripciones de material que resulta virtualmente imposible, para el jurado o los comités de selección, digerirlo.
LA DICTADURA DE LA EXHIBICIÓN DIGITAL.
En su momento, los adalides de la digitalización de las salas decían que, sin existir la película, que es un elemento costoso y voluminoso, cualquier creador tendría la oportunidad de estrenar su obra. 
La realidad ha demostrado lo contrario. Antes, las grandes producciones se encontraban restringidas por la limitación física del número de copias cinematográficas en película. Como estas tenían un coste y ocupaban un gran espacio en almacenes especializados, títulos internacionales muy sonados, llamados a reventar la taquilla,  se estrenaban, en España,  con 200, 350 o, como mucho, 500 copias de 35 mm. Ello siempre dejaba alguna pantalla libre para estrenar producciones pequeñas. Es así, por ejemplo, como, desde IB Cinema, pudimos exhibir en cines comerciales nuestras producciones,  como, entre otras, "La casa de mi abuela", un documental dirigido por Adán Aliaga que, pese a sus premios internacionales, actualmente sería imposible buscarle un hueco en ningún complejo de multicines: sin necesidad de copia física, una superproducción norteamericana copa ahora 1.000, 1.500, 2.000 o más pantallas; es una especie de dictadura, con  la misma programación en todos los lados y títulos que se repiten ¡hasta en varias pantallas del mismo complejo! No queda el menor resquicio para las producciones pequeñas que se ven forzadas a estrenarse en, por ejemplo, casas de cultura municipales. 
DIGLOSIA CINEMATOGRÁFICA
Desde luego, en el pasado también se hacían estrenos en ciertas casas de cultura, pero, como las proyecciones se llevaban a cabo en 35 mm, el público no apreciaba diferencia alguna  en la calidad de imagen entre un gran estreno de Hollywood, en la misma sala,  y una película pequeña (incluso ocurría que pequeños estrenos nacionales se veían mejor que otros norteamericanos, al ser copiados los positivos de un negativo de primera generación y no de un internegativo de tercera).
La diferencia, ahora, es abismal. Mientras que determinadas  producciones norteamericanas se estrenan en salas comerciales, gracias al nuevo DCP SMPTE, en 4K, con proyección digital desde cabina,  en las casas de cultura se suele videoproyectar usando sistemas domésticos, como el DVD o el Blu Ray, con un video proyector ubicado nefastamente cerca de la pantalla, bien colgado del techo, bien entre el público. 
Aun los espectadores menos avezados o exigentes notan que las películas españolas pequeñas, estrenadas fuera de los circuitos comerciales, ofrecen una calidad muy inferior, en lo que es una especie de diglosia cinematográfica: proyecciones de hasta 4K en salas de postín para los grandes títulos norteamericanos frente a miserables exhibiciones en sistemas domésticos con videoproyectores ofimáticos para las producciones españolas pequeñas. 
ECLOSIÓN PERVERSA
De forma perversa, lo digital, sin necesidad del filtro que imponía la tecnología fotoquímica, ha permitido la eclosión de toda una serie de títulos de producción nacional, mucho de los cuales no hubiesen superado la carrera de obstáculos que suponía "armar" una producción en 35 mm. Pero, lo digital, al no exigir copia física tampoco para los poderosos, en la práctica, les hace dueños de las pantallas comerciales. 
LOS NORTEAMERICANOS E INGLESES SIGUEN RODANDO CON PELÍCULA.
"La La Land", "Dunkerque", "Los últimos Jedi", "Wonder woman"... las mejores películas del año, todas ellas británicas y norteamericanas, se siguen rodando con película Kodak, lo que les aporta una textura orgánica diferenciadora de las producciones meramente digitales, alguna de las cuales intentan imitar el acabado "cine" de forma patética. La diferencia, es la emulsión cinematográfica. 
UN FUTURO PARA EL SÚPER-8
Incluso el mas pequeño de los pasos cinematográficos, el Súper-8, que actualmente, reiteramos,  se puede digitalizar a 5K, aporta ese elemento diferenciador que es la peculiar textura orgánica inherente a la tecnología argéntica, ya sea que se ruede en negativo, ya en inversible (con imagen positiva tras el revelado).
FORMAR A LAS NUEVAS GENERACIONES EN SÚPER-8
Si queremos que el cine, tal y como lo conocemos, no se extinga, es muy importante que en las facultades de comunicación y escuelas audiovisuales el trabajo con tecnología fotoquímica sea obligatario, adicionalmente al digital.
Para ello, el Súper-8 es fundamental: sensación orgánica, con textura cinematográfica, con equipos manejables en cuanto a tamaño y peso. 
Además, hay una razón por la cual su uso debería ser fundamental en las escuelas de cine: como cada fotograma cuesta dinero, y se necesitan 24 o 18 cada segundo, el Súper-8 impone un rigor vital a la hora del rodaje, rigor que se ha relajado en el inframundo digital: ciertos actores llegan menos preparados, los directores de fotografía cometen fallos que luego pretenden solucionar en postproducción y los directores graban horas y horas de material innecesario, lo cual se traduce, después, en tiempo de postproducción que ralentiza el cronograma y cuesta mucho dinero.
El Súper-8 comparte con los demás anchos cinematográficos otra ventaja: al final, el autor, o el productor, o alguna institución, se queda con la película original a modo de negativo. Bien conservada, como en el Archivo Mundial del Ártico, aquí en Spitzbergen,  este “filmcunable” puede durar centurias, sino milenios. Con el añadido, histórico, que ese negativo estuvo físicamente en el lugar del rodaje.Finalmente, hay, incluso, un elemento diferenciador del Súper-8 con respecto, también, a los otros pasos cinematográficos: como su tamaño es muy compacto permite que una persona sola, si domina las distintas disciplinas, se de el gustazo de hacer o participar en todas las fases de la creación de una obra: su filmación (con los controles en cámara todos en manual), su revelado artesanal, el montaje a la usanza clásica (cortando y pegando la película), la aplicación de las pistas de sonido y su sonorización analógica.
   
Ni que decir tiene que nos acostamos a las tantas… Lástima de no poder tener a bordo del rompehielos ningún proyector de Súper-8, sino sólo de diapositivas: ¡lejos quedaron los tiempos, de las singladuras con John Wright, sir John Mills y Tony Rose, en el añorado Leonidas Brezhnev, el barco que una vez llevara con orgullo la estrella roja en su proa y que en la recta final de su vida ha terminado como casino y prostíbulo de baja estofa en Hong Konk. Hace unos pocos años, le hice, al Leonidas Brezhnev, una especie de homenaje, a partir de filmaciones domésticas, que obtuvo un cierto éxito en Vimeo y, quien no lo haya visto, puede hacerlo aquí: 
BREZHNEV, MON AMOUR from IB CINEMA Motion Picture Films on Vimeo.
Si es nuevo en esta bitácora, no se olvide de leer las inauditas informaciones publicadas en las entradas anteriores: 
Capítulo 1:  https://mimundoensuper-8.blogspot.com.es/2018/05/spitzbergen-el-guardian-del-artico-en.html
Capítulo 15: https://mimundoensuper-8.blogspot.com/2018/08/spitzbergen-el-guardian-del-artico-en_24.html


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