FUMEO 9140: EL MARC 300 PARA SÚPER-8

La lámpara Marc 300, desarrollada por General Electric, fue el primer intento serio para dotar de gran potencia luminosa a los proyectores de 16 mm y Súper-8, antes de que la electrónica consiguiese miniaturizar a un tamaño aceptable los rectificadores de xenón. 

Para General Electric, la Marc300 fue todo un filón pues sólo dura 25 horas y cuesta 150 euros. Esta lámpara requiere, como la de xenón, de un rectificador,  pues su ignición necesita entre 4000 y 5000 V ( en todo caso, muy inferior a la de xenón). 

En Súper-8, si bien Elmo, Beulieu y Eumig comercializaron a pequeña escala un par de modelos con la Marc 300, el estándar de proyección con este tipo de lámpara vino desde Milán, con los Fumeo 9139 y el raro 9140. 

La única diferencia entre ambos es que el 9140, que es el que poseo, cuenta con grabación de sonido. 
Las características son sobresalientes: pese a que el obturador tiene 3 palas (para evitar el parpadeo), este Fumeo para la Marc 300 puede llenar pantallas de 7 u 8 metros. Hace años, lo usé con pantallas de seis metros, con resultados excelentes (hasta que llegaron las HTI y el xenón).

Las características técnicas del Fumeo 9140 son las mismas que las del popular 9119: enhebrado manual, enfoque micrométrico y bobinas de 800 metros. El 9140 tiene, a mayores, "cortafuegos" y un cristal atérmico, que deja pasar la luz,  pero no el calor, a la película. 
Pasó por mi cabeza convertir el 9140 a un tipo de lámpara mas moderna, pero, puesto que tengo en el almacén de IB Cinema varias lámparas Marc 300, y dado que Fumeo construyó muy pocas unidades del modelo 9140, he decidido mantenerlo en su condición original y usarlo para ocasiones especiales.