EL VALOR DE LA AMISTAD.
"Y pensar que a la guerra fuimos como enemigos", dice, al final de la película, uno de los protagonistas al otro, recordando los tiempos en que su amigo de tantas décadas, en aquel entonces un oficial alemán, durante la batalla de Dunkerke, no sólo no le remató, sino que le salvó la pierna, en lo que es una historia con valores como el perdón, la reconciliación, la clemencia y la amistad, doblemente histórica, pues:
1) no sólo recuerda al espectador la II Guerra Mundial (con el sinsentido de unos conflictos en los que se ven abocados a la lucha personas que, en otras circunstancias, serían amigas);
2) sino también a los hermanos gemelos Cosme y Damián, médicos y santos, uno de cuyos mayores prodigios fue salvar la vida de un mercader trasplantándole la pierna de un negro. En aquellos primeros tiempos de la Cristiandad, los mártires Cosme y Damián tuvieron un final desgraciado pues, tras ser torturados y quemados vivos, como sobrevivieron, fueron decapitados.
EXCEPCIONAL FACTURA.
Para ser un cortometraje grabado sin el menor apoyo institucional, sorprenden las excelentes recreaciones históricas, especialmente las de la II Guerra Mundial, con uniformes, armas y otros elementos en los que se nota el buen hacer tanto del librero Manuel Arenas, al frente de los Royal Green Jackets, así como de Jove, el conocido coleccionista de coches coruñés, que prestó un Mercedes de la época del III Reich.
Dignas de mérito, igualmente, las infografías, al principio de la película, y, a lo largo de todo el metraje, la magnífica banda sonora, compuesta por ese talento que es el compositor Sergio Moure de Oteyza. Magnífico, también, el afiche, obra del gran Carlos Lorenzo, técnico de cultura de Carral. Por no faltar, ¡hasta hay un plano grabado con dron!
PROTAGONISTAS CORUÑESES.
El rol estelar del doctor Viso, encuentra su buen contrapunto en las figuras de Estíbaliz Veiga y Alberto Casal, entre otras que son muy conocidas (y queridas) no sólo en la ciudad, sino en la comarca, como el padre Alonso, cuya iglesia parroquial, la de Santa Eulalia de Lians, en Oleiros, es pudiéramos decir, la "otra protagonista" pétrea de la película, sin olvidarnos del conocido fotoperiodista Alberto Martí Villardefrancos, la memoria fotoquímica de La Coruña, y presidente de esa encomiable institución que es la Cocina Económica.
DIEZ MINUTOS MUY AGRADABLES.
Es, "La dama del tiempo", una película tan entretenida que engancha al púlblico desde la primera secuencia: los diez minutos de su metraje saben a poco y dejan al espectador con ganas de ver más.
CINE SUBREPTICIO GALLEGO.
"La dama del tiempo" es un eslabón más de un movimiento que podría denominarse cine subrepticio gallego, iniciado a finales de la década pasada con "Rainy Day", de Andrés Victorero. Se trata de documentales y cortometrajes, rodados en plan francotirador sin subvenciones, la mayor parte de las veces en el otro idioma oficial de la región gallega, el español, que, pese a ser ignorados desde las instancias que tienen como razón de ser promover el audiovisual, suelen alcanzar miles de visionados en plataformas como Vimeo, a diferencia de lo que ocurre con muchas obras que sí se subvencionan, en las que la cifra de espectadores, si hacemos caso de los contadores oficiales de cada plataforma, en bastantes casos no son vistas mas que por unos pocos cientos de personas.
COMO DISFRUTAR "LA DAMA DEL TIEMPO" EN INTERNET.
El trabajo del doctor Trincado protagonizado por el doctor Viso se encuentra colgado ya en Vimeo, en la pantalla inferior.
Si algún lector, desde su ordenador o teléfono, tiene problemas para visionarlo, debe "clicar" encima del botón azul con la leyenda "ver en Vimeo".
Disfrute la película: ¡no le defraudará!
LA DAMA DEL TIEMPO from editspin on Vimeo.
Genial. ahora os comento mis impresiones. Pero antes debo deciros que la idea de hacer cine, cultura por tanto, en nuestra propia tierra, y con nuestra gente, vecinos del día a día, me parece muy acertada. Los personajes a mi modo de entender la historia: El realizado por Manuel Viso fue el mejor: sonrisas escasas, siempre en su papel acorde a las situaciones. Luego está "la dama": angelical sí,en mi opinión su personaje no debió sonreir tanto cuando dialoga con El protagonista (parecía que sonreía para evitar la carcajada de risa), más tarde cuando se iban los ancianos pues sí la sonrisa acompañaba bien la situación. Y el sacerdote del capuchón rojo pues muy mal, a mi modo de ver, si era un sacerdote....se vislumbraba una sonrisa cerrada en su rostro, cuando debería estar serio. Son apreciaciones hacia los personajes, tal vez los actores seguían bien el guión. Por último mi más sincero ánimo para que el cine en nuestra ciudad continúe desarrollándose.
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