Poco a poco, al término de la jornada laboral, fui llevando a cabo durante dos años, en la Cinemateca de Galicia- IB
Cinema la restauración de "Doctor Zhivago", de mi admirado David
Lean. Se trata de un rarísimo positivo con 4 pistas magnéticas independientes
(con perforaciones KS), el sistema de cine estereofónico de las grandes
superproducciones entre los años cincuenta y los ochenta, antes de la
popularización de los sistemas de Dolby. De la época de su estreno, ¡¡¡tiene medio siglo en sus fotogramas!!!
UN
TESORO, UN REGALO . "Dr. Zhivago",
en lo personal, un gran tesoro, fue un regalo personal de los queridos amigos Santi y
Cristina, para mi disfrute privativo, cuando hace un par de años se cerró el
depósito cinematográfico de U.I.P. en La Coruña.
SONIDO
MAGNÉTICO.
El sonido magnético multicanal (que yo todavía empleo en súper-8) en 35 mm se lograba aplicando sobre la película, tras su positivado, pasta magnética líquida que, "aplanada" por un rodillito, "pintaba" las pistas magnéticas que, posteriormente, tras su secado, servían para la grabación de los canales independientes.
Un costoso, complicado, lento y artesanal sistema que, sin embargo, presentaba una magnífica ventaja para el propio soporte: como la película se deslizaba sobre las pistas, y no sobre su soporte, era menos propensa a rayarse en los sucesivos pases por los cines (hace cincuenta años, se tiraban pocos positivos de cada título y estos empezaban su carrera comercial en las salas de estreno para proseguir con las de reestreno y terminar en los pueblos).
El sonido magnético multicanal (que yo todavía empleo en súper-8) en 35 mm se lograba aplicando sobre la película, tras su positivado, pasta magnética líquida que, "aplanada" por un rodillito, "pintaba" las pistas magnéticas que, posteriormente, tras su secado, servían para la grabación de los canales independientes.
Un costoso, complicado, lento y artesanal sistema que, sin embargo, presentaba una magnífica ventaja para el propio soporte: como la película se deslizaba sobre las pistas, y no sobre su soporte, era menos propensa a rayarse en los sucesivos pases por los cines (hace cincuenta años, se tiraban pocos positivos de cada título y estos empezaban su carrera comercial en las salas de estreno para proseguir con las de reestreno y terminar en los pueblos).
AUTÉNTICO
SONIDO MULTICANAL.
Las películas estereofónicas con sonido magnético en 35 mm poseen una pista óptica normal, para su reproducción monofónica en cines sin equipamiento magnético (la inmensa mayoría, en su época). Para la reproducción magnética estereofónica, a los proyectores había que añadirles un artilugio, el lector magnético (o cabeza magnética), que se denomina en inglés "penthouse" (ático), con los cuatro cabezales magnéticos, que se colocaba en la parte superior (de ahí deriva su nombre en inglés) del proyector de 35 mm, antes del rodillo dentado de admisión. Los positivos con pistas magnéticas venían, también, con pista óptica, que se puede reproducir por la lectora óptica normal (con una bombilla excitadora o, en los últimos años, lectores láser-LED).
Mi positivo de 35 mm de "Doctor Zhivago", que se estuvo exhibiendo, en sucesivas reposiciones, desde 1966 a 1983 (según la hoja de repaso, firmada por Cristina, de United International Pictures), se encuentra ahora, tras la restauración, en un estado sorprendentemente bueno, para disfrutar el 35 mm anamórfico en todo su esplendor.
La nitidez de la imagen es extraordinaria pues "Dr. Zhivago" se rodó en España, en 65 mm, y el tiraje procede a partir de un internegativo de primera generación.
Las películas estereofónicas con sonido magnético en 35 mm poseen una pista óptica normal, para su reproducción monofónica en cines sin equipamiento magnético (la inmensa mayoría, en su época). Para la reproducción magnética estereofónica, a los proyectores había que añadirles un artilugio, el lector magnético (o cabeza magnética), que se denomina en inglés "penthouse" (ático), con los cuatro cabezales magnéticos, que se colocaba en la parte superior (de ahí deriva su nombre en inglés) del proyector de 35 mm, antes del rodillo dentado de admisión. Los positivos con pistas magnéticas venían, también, con pista óptica, que se puede reproducir por la lectora óptica normal (con una bombilla excitadora o, en los últimos años, lectores láser-LED).
Mi positivo de 35 mm de "Doctor Zhivago", que se estuvo exhibiendo, en sucesivas reposiciones, desde 1966 a 1983 (según la hoja de repaso, firmada por Cristina, de United International Pictures), se encuentra ahora, tras la restauración, en un estado sorprendentemente bueno, para disfrutar el 35 mm anamórfico en todo su esplendor.
La nitidez de la imagen es extraordinaria pues "Dr. Zhivago" se rodó en España, en 65 mm, y el tiraje procede a partir de un internegativo de primera generación.
RESTAURACIÓN:
UN TRABAJO DE AMOR CINÉFILO.
El
enorme esfuerzo que supone ver restaurado este positivo incluye los siguientes
pasos:
1) reparación de perforaciones dañadas;
2) aunque el positivo ya trae, como era lo normal, sus "topos" negros de fin de rollo (en inglés cue dots) operadores poco cuidadosos taladraron fotogramas; debo tapar estos orificios con cinta negra, de forma que, en proyección, no se vean más que por el ojo experto. La finalidad de los "topos" era, en los tiempos de los dobles proyectores en cabina, avisar a los proyeccionistas de que pusieran en marcha la otra máquina con el siguiente rollo;
3) limpieza y tratamiento con Thermofilm (no vale cualquier otro producto, como Filmrenew, pues ataca las pistas magnéticas). El Thermofilm debo aplicarlo con guantes y mascarillas, pues se absorbe a través de la piel y produce cáncer (buenas reprimendas que tengo que sufrir, al respecto, de mi esposa, cuando llego a casa por la noche, oliendo a estos productos químicos (otros llegan oliendo a alcohol y colonias). Naturalmente, aplico estas soluciones con la ventilación forzada. Dada su peligrosidad, su transporte por medios normales está prohibido, de forma que lo traigo de Inglaterra con un transportista particular.
4) Adición de núcleos.
y 5) sustitución de las cajas metálicas originales, herméticas, por unas de un plástico especial, que transpira, para evitar el síndrome del vinagre (el SIDA de las películas).
Otras personas, en su tiempo libre, no hacen nada, pero uno, como decía aquel gran hombre, prefiere descansar cambiando de trabajo y tomando esta labor de restauración como un hobby.
"Doctor Zhivago", como puede verse en una de las fotos, viene dividida en la friolera de 12 rollos de 600 metros (debido al grosor de las bandas magnéticas, en cada caja caben bastantes menos metros que en una película normal, sin contar con el hecho, además, de que el positivo es en triacetato de celulosa, mas grueso que el poliéster de estos tiempos).
A modo de curiosidad coruñesa resaltar que que este positivo, según la hoja de repaso, se exhibió por última vez en el Cine Rex de La Coruña (con sonido monofónico), en 1983.
1) reparación de perforaciones dañadas;
2) aunque el positivo ya trae, como era lo normal, sus "topos" negros de fin de rollo (en inglés cue dots) operadores poco cuidadosos taladraron fotogramas; debo tapar estos orificios con cinta negra, de forma que, en proyección, no se vean más que por el ojo experto. La finalidad de los "topos" era, en los tiempos de los dobles proyectores en cabina, avisar a los proyeccionistas de que pusieran en marcha la otra máquina con el siguiente rollo;
3) limpieza y tratamiento con Thermofilm (no vale cualquier otro producto, como Filmrenew, pues ataca las pistas magnéticas). El Thermofilm debo aplicarlo con guantes y mascarillas, pues se absorbe a través de la piel y produce cáncer (buenas reprimendas que tengo que sufrir, al respecto, de mi esposa, cuando llego a casa por la noche, oliendo a estos productos químicos (otros llegan oliendo a alcohol y colonias). Naturalmente, aplico estas soluciones con la ventilación forzada. Dada su peligrosidad, su transporte por medios normales está prohibido, de forma que lo traigo de Inglaterra con un transportista particular.
4) Adición de núcleos.
y 5) sustitución de las cajas metálicas originales, herméticas, por unas de un plástico especial, que transpira, para evitar el síndrome del vinagre (el SIDA de las películas).
Otras personas, en su tiempo libre, no hacen nada, pero uno, como decía aquel gran hombre, prefiere descansar cambiando de trabajo y tomando esta labor de restauración como un hobby.
"Doctor Zhivago", como puede verse en una de las fotos, viene dividida en la friolera de 12 rollos de 600 metros (debido al grosor de las bandas magnéticas, en cada caja caben bastantes menos metros que en una película normal, sin contar con el hecho, además, de que el positivo es en triacetato de celulosa, mas grueso que el poliéster de estos tiempos).
A modo de curiosidad coruñesa resaltar que que este positivo, según la hoja de repaso, se exhibió por última vez en el Cine Rex de La Coruña (con sonido monofónico), en 1983.
N.del A.: cue dots es la denominación en inglés para lo que en España se llaman topos; penthouse, en inglés, es lo que en español llamamos lector magnético o torre de lectura magnética.
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