viernes, 21 de octubre de 2016

LA ESENCIA DEL CINE VUELVE... CON EL SÚPER-8

Aunque son muchas las producciones, para cine y televisión, que en Estados Unidos se siguen filmando con película, prácticamente sólo queda Tarantino montando por el procedimiento clásico: tirando un copión positivo del negativo, cortando y pegando este copión de trabajo, y después replicando el montaje en el negativo original. Desde hace varios años, lo que se suele hacer es digitalizar el negativo, rebajar la calidad a 2K, y editar en ordenador: nada que no pueda hacer una bedela de colegio mayor en su cuchitril de recepción con un portátil.
Pero el regreso a las esencias del cine es ahora posible gracias a las nuevas emulsiones negativas de Kodak en súper-8  y a un laboratorio teutón.


Tradicionalmente, el súper-8 siempre estuvo asociado a un tipo de película denominada inversible, esto es, que tras su revelado proporciona una imagen positiva, que se puede montar con empalmadora y moviola.
Actualmente, sin embargo, en color, solo hay un tipo de película inversible: la Fujifilm Provia; es magnífica para montaje y proyección directa, digitaliza muy bien... pero no admite el menor error de exposición (su latitud es de medio diafragma) y cuesta un ojo de tu cara ¡y el riñón de tu mujer!
El año pasado Kodak introdujo en el mercado de súper-8 (paso que desde 2005 se encuentra en su portafolio profesional), la non plus ultra de la tecnología argéntica negativa: la Vision 50, que se añadía a su gama más veterana Vision 200 y Vision 500.  Con estas películas, el modus operandi era el mismo que en 16, 35 y 65 mm: digitalizar tras el revelado y editar y postproducir en digital, bien para su distribución en digital, bien en película mediante kinescopio (paso de digital a película).


Este último proceso, se encuentra disponible, en súper-8, desde este verano con una cámara especial, desarrollada por Fujifilm en cooperación con Sony: del negativo digitalizado se hace un positivo de proyección inversible. La primera pelicula que ha empleado este proceso en el mundo es "La noche de San Juan", filmada por quien escribe con Kodak Vision 500 y montada por Marc Martí (positivo actualmente en el Festival de San Roque, para el cual me fue solicitada por su director, Esteban Gallego, como muestra de lo que es el futuro para el súper-8). Este procedimiento ofrece lo mejor de ambos mundos: la versatilidad del negativo, con su amplia latitud de exposición, y el colorido mas bonito que el real de la inversible. "La noche de San Juan", que hace tiempo sobrepasó,  en Vimeo, los 100.000 espectadores, se podrá ver proyectada en súper-8 en la ciudad en la que se rodó, La Coruña, dentro de la conmemoración LC GLOBAL SUPER8 DAY.
Rizando el rizo, Kodak ha puesto a disposición de los cineístas película de copiado en poliéster de súper-8 directamente de negativo súper-8 mediante ventanilla húmeda (que minimiza rayas y otros deterioros propios de la manipulación durante el montaje).
La primera pelicula en España que se está postproduciendo por este procedimiento clásico pero, a la vez, novedoso en pleno siglo XXI, es de Marc Martí:  cinco rollos que filmó en plan experimental para controlar el proceso.
Marc, debo de aclarar aquí, no es "Mi doble en los Alpes", sino en Vall d'Uxo: valoramos las mismas cámaras y ópticas (de hecho, filmamos con idéntico equipamiento técnico) y nos cae la baba con las criaturas del espacio exterior que filma José Luís Villar.
Los pasos que sigue Marc para el experimento son los siguientes:
1)En lugar de copión, Marc hizo un telecine con un proyector sincronizado a cuarzo para una velocidad exacta de 24 fotogramas por segundo.


2) A continuación, invirtió la digitalización a positivo con Davinci Resolve;


3) Kinescopió los títulos a película negativa;


4) Añadió una cola estándar de numeración regresiva, para sincronizar el sonido;


5) Una vez que la película está editada digitalmente, va replicando plano a plano cortando físicamente, con empalmadora y moviola,  sin desviarse ni un fotograma con respecto a la edición en computadora.
6) El negativo queda listo para su envío al laboratorio de Alemania para el tiraje de un positivo para proyección y el pintado de las pistas magnéticas en los bordes para el repicado del sonido
Todo ello es un proceso caro, lento, minucioso...pero es el culmen de la tecnología mecano-química del siglo XIX con auxilio de lo último en tecnología numérica del siglo XXI: no estamos, pues, ante una mero trabajucho audiovisual, sino ante un complejo trabajo de creación artística que exige el dominio de varias disciplinas.
Como este experimento es el primero de sus características en España, si llega a culminarse a tiempo, se proyectará, naturalmente, en LC GLOBAL SUPER-8 DAY de La Coruña, el próximo 3 de diciembre.
(imágenes digitales tomadas por Marc Martí)

2 comentarios:

  1. Excelente nota, tuve lo oportunidad de ver un positivado de super8 50D y queda increíble.

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  2. yo lo que deseo es que vuelvan a salir peliculas super 8 para ver en casa y poder filmar con peliculas color reversibles a precio accesible.nadie de la industria se molesta en ver que hay miles y miles de aficionados al super 8 queriendo tener material nuevo.todos los ejecutivos de hoy destruyeron el cine ni se mlestan en que siga adelante junto a la tecnologia digital.

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