CADA CUATRO FOTOGRAMAS

Podría ser con cualquier otra película antigua, que estuviese revisando, ¡pero no!, Murphy quiso que el rodillo de goma del Elmo AL se empezase a deshacer, súbitamente, con los tres avances de "Spitsbergen: el Guardián del Artico" recién llegados del laboratorio italiano Onda Radio Service en 16 mm con sonido magnético, como narré en la entrada de ayer.

Revisión en la moviola Zeiss, fabricada durante el III Reich

De no estar dotados estos tres trabajos pista magnética, la limpieza habría sido fácil, usando el solvente adecuado sin daño para la película, dado que el soporte es de poliéster, pero la pista magnética obliga a precauciones especiales. 
Además, no puedo usar Vitafilm, por si acaso daño las pistas y es necesario pistar de nuevo (el pintado magnético es virtualmente imposible si está tratada con Vitafilm: ¡debí de aplicarlo antes!, pero la impaciencia me pudo).

Antes del tratamiento: goma adherida cada cuatro fotogramas.

No queda otra que, con una solución especial, que fabriqué con químicos que encontré localmente, en las  proporciones facilitadas por el laboratorio, que ir limpiado la película poco a poco, a mano, en una labor ingente pues el rodillo ha manchado ¡uno de cada cuatro fotogramas!

Después del tratamiento: fragmento ya limpio

Comencé ayer por la tarde, y de momento la tarea, aunque engorrosa y lenta, va por buen camino.
Desde luego que es una fastidio pero, este tipo de avatares, inimaginables para la gente que vive en el inframundo digital, crean una especie de comunión entre el autor y su película, que se adquiere al tocar uno a uno los miles de fotogramas: una vivencia imposible en el frío mundo digital. 

Los paños de algodón que compré de segunda mano, ya limpios, y que impregno con el líquido que fabriqué ¡traen el nombre del Hospital Juan Canalejo!