SUSPIRIA: RESTAURACIÓN CULMINADA Y COMPROBADA CON EL FUMEO

Una de mis películas favoritas es la obra de culto "Suspiria", de Dario Argento, no sólo por la historia o su narrativa cinematográfica (con esas secuencias planificadas para sobresaltar al espectador), sino también por su esmerada cinematografía y su cuidadoso uso del color con el fin de influir en el subconsciente. Dario Argento fue tan meticuloso que, pese a no ir sobrado de presupuesto, consiguió que, en Italia, todos los positivos, en 16 mm y 35 mm, fueran revelados en auténtico IB Technicolor de tres matrices, justo inmediatamente antes de que las máquinas de imbibición fueran desmanteladas para siempre, para transformarse en un laboratorio de revelado normal, para desgracia de directores y cinéfilos: el color, en cine, nunca se ha vuelto a ver igual.

Cuando la coleccionista Juliana Kelly consiguió un positivo de "Suspiria" en 35 mm, accedió a cambiarme por otro título de su interés "Suspiria" en 16 mm con sonido original en italiano, que en su día había pertenecido al mercado de alquiler non theatrical (universidades, ejército, etc) del amado país transalpino. 

Su estado, después de 40 años de trote,  no era tan malo como esperaba: no había cortes ni empalmes, pero si piquetes y rayas negras. El soporte estaba reseco, algo curvado, pero, por lo menos, no presentaba el menor indicio de síndrome del vinagre al que tan propensas son las películas en Technicolor. Lo mejor de todo es que esta "Suspiria" en 16 mm es anamórfica, con una absolutamente inmersivo formato de 2.66:1.

HORAS DE TRABAJO. 
Meticulosamente, en una labor de días (propia de una auténtica cinemateca, como es IB Cinema), fue revisando cada una de los decenas de miles de perforaciones, reparando los piquetes con una cinta de poliéster Fujifilm, especial para este fin, que no se decolora con el tiempo y con un poder adhesivo garantizado para la eternidad. 
Tras ello, sumergí los distintos rollos en Film Renew, un maravilloso y cancerígero producto que, como ahora no se puede enviar por mensajería, me trae un amigo marino mercante desde los Estados Unidos. Posiblemente, sea IB Cinema el único archivo de Europa todavía usando Film Renew, tan popular al otro lado del charco. 
Tras este proceso, otro amigo, Alberto Vangelisti, de Movie Magnetic, en Italia, procedió a pistar la película magnéticamente, con el fin de sincronizar el doblaje castellano procedente de una fuente digital.
El resultado de muchas horas de trabajo, y semanas de espera, pudo comprobarlo mi familia este fin de semana: sonido labialmente sincronizado e imagen en la que, gracias al Film Renew, habían desaparecido todas las rayas negras del soporte (por fortuna, la emulsión se encontraba incólume); gracias al Film Renew, también, la base de la película, en triacetato, recuperó sus dimensiones habituales. 

Publicado el vídeo de mas abajo en Facebook, me escribió Richard Haines, el mayor especialista mundial en Technicolor, y autor del mas importante libro sobre el tema (que, en su edición de Mc Farland, se encuentra en la biblioteca Cinemateca de Galicia/ IB Cinema), para recordarme que, ahora, con pista magnéticas, mantenga el positivo bien ventilado, pues la combinación Technicolor y bandas magnéticas contribuye, en el triacetato, a desencadenar el tan temido síndrome del vinagre. 
La proyección de prueba se hizo con el Fumeo Xenon 500, idéntico al de la "filmoteca"-CGAI, pero con las siguientes mejoras: presores para rodillos dentados, presor de imagen con fuerza variable, ventanilla de formato variable, cabeza mecánica desmodrónica de apertura total, parábola reflectora tratada con rodio y formador de bucle no sólo inferior sino superior. 
SUSPIRIA. FUMEO 9135 XENON 500 16MM from IB CINEMA Motion Picture Films on Vimeo.